lunes, 22 de junio de 2009

Corriente

Chaparritas por aquello de cargarlas,
delgaditas para no tronarlas.
Flexibles, sí, porque se siente más rico;
pero con carne por eso de las mordidas.

Ojonas, claro, para mirarme en ellas.
Todo el tiempo.
Desnudos para conservar el calor,
bajo las sábanas, cuestión de pudor.

Mis dientes, autógrafo en tu ingle,
te recuerdan que fuiste mía.
Tu entre pierna húmeda, tibia,
te advierte que aquí estoy.

Chaparrita, insisto, porque soy alto.
Delgaditas, sino se ven mal.
Flexibles, para domarlas con gusto.
Pero con carne, como tú.

viernes, 19 de junio de 2009

De temporada

La manzana me recuerda a tí;
ver cómo se oxida, se consume y se marchita.
De pronto...
Se me antojan tus pezones sabor durazno,
tu jugosa piel-sandía, tus labios en gajo;
comer tu nectar de mango.

Hoy la estación cambia, no sabré más a tí.

sábado, 13 de junio de 2009

Lunes

Vicio, es lo que tengo a tu aroma;
más o menos, me tienes la medida.
Tibia la cama en la mañana,
no prendo la luz pues quiero que se repita.

En el lecho fijamos las miradas,
tu a mi pecho, yo a tus ojos.
En la mesa, nos gustan los platos dulces;
hay que quitar lo salado del sexo.

En la noche voy a atacarte.
Tú me esperas, lo sé;
quieres morir en el intento.

Amo

Los músculos en tu pierna,
los tendones de tus dedos,
las costillas en tu tronco,
el iris de tus ojos.

El salivar de tu boca,
lo húmedo de tu entrepierna,
la piel en tu escote,
los nudos en tu cabello.

Tu voz en mis oídos,
mi sexo envuelto por el tuyo,
mis manos por todo tu cuerpo,
mi ronco pecho construyendo tu nombre.